NORMAS ¿hasta donde llega la libertad?

Me pregunto el sentido de algunas normas, pensaba que estaban hechas para una buena convivencia entre los ciudadanos, pero… ¿hasta donde vamos a llegar con ellas y cuanto más van a coartar nuestra libertad?

Desde no poder hacer fiestas de cumpleaños en los parques públicos a no poder consumir bebidas alcohólicas en la vía pública. No todo el mundo es incívico, hay gente que sabe recoger la basura que se genera tras comer un pastel y beber unos refrescos. No todos los que beben se emborrachan y hacen botellón, a muchas personas le apetecería tomarse una cervecita  en la calle, con el frescor del anochecer.

No hace muchos años…  la gente bajaba sus sillas a la calle y hablaba con los vecinos tomando un vinito. Ahora quieren encerrarnos en nuestros diminutos hogares si queremos disfrutar de la familia y los amigos. Ahogarnos con las normas y sacar provecho de ellas, multando y sacándonos el poco dinero que nos queda.

Recuerdo con nostalgia la noche de san Juan, con sus hogueras… los vecinos se reunían al calor de sus llamas, charlaban, bailaban, bebían… ya no se puede, han quedado prohibidas. El gobierno defiende con uñas y dientes un idioma porque es nuestra identidad, pero hay otras cosas que hacen la identidad de un pueblo… y las están matando.